Hace
algunas semanas un familiar me pedía un favor. Me eché a temblar –uno no sabe
lo que le pueden pedir en los tiempos que corren-, pero cuando lo escuche
respiré primero aliviado y luego
sorprendido. Quería localizar un viejo libro que había leído en su
adolescencia. “Una novelita de gánster, Ramón. No es que sea una obra maestra,
pero me trae recuerdos de lo bien que lo
pasé leyéndola, y me gustaría localizar algún ejemplar”. Pensé, aunque no se lo
dije, que nada vuelve a ser lo mismo, que el tiempo contamina nuestras
emociones y quizás ahora aquella novela no le causaría la misma impresión que
la que leyó hace años. Lo cierto es que
aquel ramalazo de nostalgia que atacaba a mi cuñado me asaltó también a mí,
y esa epidemia emocional me puso la tarea de
recordar aquellos libros con los que tanto disfruté, cuando daba mis
primeros pasos como lector, y que pasaron
al olvido por alguna razón para no volver a toparme con ellos. Y esa máquina
increíble que es el cerebro rápidamente puso ante mis ojos el recuerdo de dos
libros. A uno de ellos le faltaba la cubierta y lo había encontrado dentro de
una caja llena de trastos viejos de los
que un vecino, que se trasladaba de edificio, trataba de desprenderse. Tampoco,
como mi cuñado, recordaba el autor, pero sí el título, "El grumete". Del otro
libro, uno de los primeros que no me regalaron sino que compré siendo
adolescente, sí me asaltaron más
imágenes. Era una antología de relatos cortos editada en aquella colección mítica de Bruguera “El
libro Amigo”, allá por los setenta del pasado siglo. La nostalgia lo mete a
uno, de manera imprevista, en
emocionantes aventuras. Hasta ahora he logrado dar –a través del portal en
Internet de una librería argentina- con el último libro de los que he
mencionado, pero no desfallezco en la búsqueda de los demás. Ramón Clavijo
Provencio
Una biblioteca es lo más parecido a un laberinto, un laberinto lleno de libros, de mundos por descubrir.En homenaje a las bibliotecas y a la lectura , preside la cabecera de este blog un dibujo del pintor jerezano Carlos Crespo Lainez: "Noche de lectura".
LECTORES SIN REMEDIO
Este blog tiene su origen en la página semanal de libros de "Diario de Jerez", "lectores sin remedio", que llevamos escribiendo desde el año 2007. Aunque el blog no es necesariamente una copia de la mencionada página, en él se podrán leer artículos que aparecen en ella. Pero el blog, por supuesto, pretende ser algo más... Los responsables son los dos lectores sin remedio, de los que facilitamos la siguiente información: Ramón Clavijo es Licenciado en Historia por la Universidad de Sevilla y es actualmente Técnico Superior Bibliotecario del Ayto. de Jerez de la Frontera. Está especializado en fondos bibliográficos patrimoniales. José López Romero es Doctor en Filología Hispánica por la Universidad de Sevilla y actualmente es Catedrático de Lengua y Literatura en el I.E.S. Padre Luis Coloma de Jerez de la Frontera. Especializado en la literatura dialógica del s. XVI y en la novela del s. XIX.
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