A veces darse
una vuelta por Internet para leer las críticas que sobre un determinado libro
han colgado sus lectores, es un ejercicio muy instructivo. Confieso que yo lo
he hecho tanto con libros que iba a leer, como con algunos ya leídos para
comprobar si mis impresiones de lector coincidía con otros a veces de distintos
países incluso. El otro día, sin ir más lejos, lo hice con uno que iba a
empezar a leer ‘El intocable’ de John Banville. Lo había comprado hacía ya un
tiempo, pero hace unos meses leí ‘Antigua luz’, y ahora consideraba el momento
de volver sobre este autor con otra de sus narraciones más representativas.
Tengo también pendiente alguna novela negra que publica bajo el seudónimo de
Benjamín Black. Pues bien, puse en Google el título y de inmediato me saltaron
un sinnúmero de entradas, entre ellas, la de un blog que rezaba lo siguiente: “He
acabado el libro y no he dejado ninguna marca. Ni una línea subrayada, ninguna
esquina doblada. Me parece que es un libro que no pasará a la historia de mi
biblioteca en un sitio preeminente. ¡Benigno! (nombre del bloguero que se
dirige a sí mismo) ¿No te ha gustado? No, no es eso. Es que no me ha calado
suficientemente hondo, me ha entretenido pero nada más”. El comentario de
Benigno hace preguntarme ¿con qué
intenciones nos acercamos a los libros? ¿Qué esperamos encontrar en ellos y qué
queremos que ellos nos den? Está claro que nos acercamos a los libros con
distintos objetivos; de unos, solo queremos que nos entretengan (‘El intocable’
al menos lo consiguió con Benigno); a otros los leemos por el autor, del que ya
hemos leído algo que nos ha gustado o le vamos a dar otra oportunidad. Pero esperar
de todos los libros que nos conmuevan, que nos cambie la vida, que nos cale en
lo más profundo es esperar demasiado de la literatura. “Seguro que terminas
hablando de las mujeres” –me dice mi señora, sabedora de que estoy escribiendo
el artículo. Pues la verdad es que no se me había ocurrido la comparación. José
López Romero.
Una biblioteca es lo más parecido a un laberinto, un laberinto lleno de libros, de mundos por descubrir.En homenaje a las bibliotecas y a la lectura , preside la cabecera de este blog un dibujo del pintor jerezano Carlos Crespo Lainez: "Noche de lectura".
LECTORES SIN REMEDIO
Este blog tiene su origen en la página semanal de libros de "Diario de Jerez", "lectores sin remedio", que llevamos escribiendo desde el año 2007. Aunque el blog no es necesariamente una copia de la mencionada página, en él se podrán leer artículos que aparecen en ella. Pero el blog, por supuesto, pretende ser algo más... Los responsables son los dos lectores sin remedio, de los que facilitamos la siguiente información: Ramón Clavijo es Licenciado en Historia por la Universidad de Sevilla y es actualmente Técnico Superior Bibliotecario del Ayto. de Jerez de la Frontera. Está especializado en fondos bibliográficos patrimoniales. José López Romero es Doctor en Filología Hispánica por la Universidad de Sevilla y actualmente es Catedrático de Lengua y Literatura en el I.E.S. Padre Luis Coloma de Jerez de la Frontera. Especializado en la literatura dialógica del s. XVI y en la novela del s. XIX.
No hay comentarios:
Publicar un comentario