Llevaba un rato en mi
librería de guardia, y durante ese tiempo me sorprendió que un número
apreciable de clientes entrara preguntando
por una biografía de Carlos I. Más extrañado me quedé cuando comprobé
que estos clientes eran adolescentes, algunos acompañados por adultos –ante la
cara de extrañeza de alguno de estos jóvenes recorriendo las calles del local,
supuse que los acompañantes irían en calidad de guía para orientarlos por un
territorio que no habrían pisado nunca.
Luego mi buen amigo el librero me aclaraba el asunto. Aquellos chavales no iban
buscando los excelentes textos de Geoffrey Parker o Fernand Braudel sobre el
personaje antes mencionado, sino un modesto librito (Carlos I, rey emperador de Laura Sarmiento), sobre la serie que una cadena televisiva
emite sobre el primero de los Austria en
nuestro país. Al parecer había sucedido meses antes lo mismo con el personaje
de Isabel de Castilla. Esto es, el éxito de la serie derivó en un inesperado éxito de ventas del
libro preparado al efecto. Pese a todo, y lamentando que ningún libro sobre
nuestra historia escrito por un historiador de prestigio no tuviera por sí solo
el tirón entre nuestros jóvenes de estos modestos impresos –estaría a mucha
distancia en cuanto a ventas el que recientemente ha publicado Arturo Pérez
Reverte (La Guerra Civil contada a los
jóvenes)-, sí es para alegrarse de que series históricas como esta que
traemos al caso sobre Carlos I estén, a la vista de las estadísticas de
audiencia, batiendo records y además, y esto es lo que más nos interesa,
llevando a un número considerable de jóvenes a interesarse por personajes históricos claves para entender la
historia de nuestro país. Se puede perdonar que esos libros –con un aceptable
rigor histórico- no estén escritos por Parker
o Braudel, ¿no creen? Y tras esta
distracción en mi librería de guardia, en una fría mañana otoñal, proseguí con mi búsqueda
de algunos textos de Oliver Sacks, el neurólogo, pero también humanista, que tanto nos enseñó sobre los
misterios del cerebro y, sobre todo, la
maravillosa complejidad del ser humano. RAMÓN
CLAVIJO PROVENCIO
Una biblioteca es lo más parecido a un laberinto, un laberinto lleno de libros, de mundos por descubrir.En homenaje a las bibliotecas y a la lectura , preside la cabecera de este blog un dibujo del pintor jerezano Carlos Crespo Lainez: "Noche de lectura".
LECTORES SIN REMEDIO
Este blog tiene su origen en la página semanal de libros de "Diario de Jerez", "lectores sin remedio", que llevamos escribiendo desde el año 2007. Aunque el blog no es necesariamente una copia de la mencionada página, en él se podrán leer artículos que aparecen en ella. Pero el blog, por supuesto, pretende ser algo más... Los responsables son los dos lectores sin remedio, de los que facilitamos la siguiente información: Ramón Clavijo es Licenciado en Historia por la Universidad de Sevilla y es actualmente Técnico Superior Bibliotecario del Ayto. de Jerez de la Frontera. Está especializado en fondos bibliográficos patrimoniales. José López Romero es Doctor en Filología Hispánica por la Universidad de Sevilla y actualmente es Catedrático de Lengua y Literatura en el I.E.S. Padre Luis Coloma de Jerez de la Frontera. Especializado en la literatura dialógica del s. XVI y en la novela del s. XIX.
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