Desde hace
unos meses he cogido la costumbre, no sé si consecuencia de la edad que no
perdona, de mirar la contraportada de los libros que me interesa adquirir, para buscar información –que cada vez es más
corriente- sobre si está fabricado con papel reciclado o
ecológico. La última manía de lector que recuerdo antes de esta, fue cuando
miraba el canto de estos para comprobar si estaban cosidos o pegados. El
abaratamiento de las encuadernaciones ha hecho casi desaparecer la prestancia
de los libros cosidos, y hoy es
común la insufrible visión de los libros
desencuadernándose a poco que por sus páginas pase más de un lector. Pero
ahora, como les decía, me asalta esta otra manía, de tal manera que a veces
estoy más pendiente de encontrar el dichoso sellito “libre de cloro” que de hojear y ojear como debe ser el libro que
puedo adquirir. Todo esto me lleva a recordar la curiosidad que despertó hace
unos años, la presentación de un perfume -Paper Passion- que conseguía evocar el aroma que desprenden los
libros, en este caso nuevos, y no el típico olor a viejo avainillado y dulzón
que provoca con el tiempo la descomposición de la celulosa y la liberación de
la lignina. En este caso se buscaba el olor que desprenden los compuestos
utilizados para fabricarlo –papel, pegamento, diversos productos químicos y
tinta- antes de su degradación, cuando se mezclan y volatilizan. El poner en un
perfume el olor a libro nuevo, el Paper Passion, fue una idea del estilista,
pero también gran bibliófilo, Karl Lagerfeld. Aquello tuvo un éxito efímero
pero tenía su lógica: si el libro en papel desaparecía por la irrupción del
libro electrónico, al menos para los nostálgicos se preservarían sus olores. Ya les digo que
el éxito fue fugaz, quizás porque lo que se vaticinaba como una guerra de
exterminio - donde el exterminado sería el libro convencional- acabó dando lugar a otro paisaje más llevadero, que no
significa menos fácil, donde lo electrónico y el libro convencional tratan de
coexistir. Ramón Clavijo Provencio
Una biblioteca es lo más parecido a un laberinto, un laberinto lleno de libros, de mundos por descubrir.En homenaje a las bibliotecas y a la lectura , preside la cabecera de este blog un dibujo del pintor jerezano Carlos Crespo Lainez: "Noche de lectura".
LECTORES SIN REMEDIO
Este blog tiene su origen en la página semanal de libros de "Diario de Jerez", "lectores sin remedio", que llevamos escribiendo desde el año 2007. Aunque el blog no es necesariamente una copia de la mencionada página, en él se podrán leer artículos que aparecen en ella. Pero el blog, por supuesto, pretende ser algo más... Los responsables son los dos lectores sin remedio, de los que facilitamos la siguiente información: Ramón Clavijo es Licenciado en Historia por la Universidad de Sevilla y es actualmente Técnico Superior Bibliotecario del Ayto. de Jerez de la Frontera. Está especializado en fondos bibliográficos patrimoniales. José López Romero es Doctor en Filología Hispánica por la Universidad de Sevilla y actualmente es Catedrático de Lengua y Literatura en el I.E.S. Padre Luis Coloma de Jerez de la Frontera. Especializado en la literatura dialógica del s. XVI y en la novela del s. XIX.
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